Las temperaturas empiezan a bajar durante los meses de otoño y nuestra casa también empieza a sentirlo. Agregando algunos detalles podemos aportarle calidez y adaptarla a los colores de la estación.
A pesar de que en el otoño aparece el frío, la naturaleza nos ofrece paisajes llenos de colores cálidos como el beige, ocre y amarillo. Este es el primer indicador para transformar nuestros espacios.
- Utilizá estos colores en accesorios como almohadones, alfombras, objetos, mantas, lámpara, etc para inundar los rincones de colores otoñales.
- La gama a utilizar va desde los colores beige y marrones hasta la paleta de verdes claro, seco y oscuro.
En otoño aparecen las ganas de estar acurrucados, descansar y disfrutar fines de semanas adentro de casa. Si abrigamos los espacios nos sentiremos más cómodos y con ganas de disfrutar nuestra casa
- Colocá un canasto con mantas, plaids o almohadones extras en tu living o sala de estar para que quien lo utilice pueda agarrar abrigo extra y utilizarlo.
- Las alfombras siempre abrigan! Se pueden colocar tanto en los espacios grandes como en rincones como al lado de las camas para no sentir el frio en los pies al salir de la cama o en el baño.
Hay objetos y materiales que sin darnos cuenta aportan mucha calidez a los ambientes. En otoño e invierno aprovechemos para sacarlos afuera y llenar los espacios.
- Madera: es el material más cálido para utilizar en casa. ¿Cómo agregarlo fácilmente? Con un canasto con troncos / colocando uno o dos troncos como mesa auxiliares cerca de los sillones.
- Velas: si no cuentan con chimenea no hay que renunciar a la idea de tener fuego en casa. Las velas consiguen el mismo efecto, un tono de luz similar y la misma sensación.
El otoño es una estación de calma y relax, con colores marrones, naranjas y tonos equilibrados. Una época para disfrutar del frio desde nuestra casa nos encanta transformarlo en un hogar confortable, cálido y acogedor.
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